Todo ello adaptado a mi thermomix 21, a un horno que daría para otro blog así que si com esto está rica rica, no sé lo que puede ser en condiciones óptimas. Eso sí, los limones son de primera, traídos del propio árbol está mañana. Con esta masa hay para dos, y aguanta perfectamente refrigerado en la nevera, envuelto en plástico, 2 días.
Ingredientes:
- 1 sobre de levadura seca de panadería
- 1 cucharadita de azúcar moreno
- 60 g de aceite de oliva virgen extra
- 300 g de harina de repostería
- 300 g de harina de fuerza
- 1 cucharadita de sal
- 350 g de agua
En primer lugar hay que disolver la levadura, para ello con 1/3 del aceite, 50 gr de agua, y el azúcar. Poner 1 minuto a velocidad 2 y temperatura 40. Añadir la sal, la harina y el resto del agua y amasar durante 4 minutos en velocidad espiga.
Dejar reposar en la thermomix hasta que salga por el bocal. Tardará al menos una hora, pero mejor si la dejas 2-3.
Poner en la fuente del horno, 4 cucharadas de aceite y extender con las manos la mitad de la masa. Dejar reposar otra media hora.
Precalentar el horno, sin ventilador, con calor arriba y abajo a 220 grados.
Poner por encima el aceite restante, sal en escamas, romero fresco y rodajas de limón muy finas.
Hornear sobre 25 minutos, habrá desaparecido todo el aceite y estará dorada.
También muy rico con medios tomates cherry, orégano y sal, con aceitunas, con anchoas en salazón, o simplemente con aceite y sal, que se asemejaría a la torta de aceite que se come por Castilla y que también está riquísima.